Cabalgamos en este mundo…
buscando nuestra media naranja,
esa persona que se dice ser…
nuestro complemento. Decimos
que cuando la hallemos seremos felices,
estaremos completos y, yo te digo
eso es una mentira, cuando
encontremos a la persona que quiera
compartir su vida con nosotros,
se habla de “compartir” no se habla
de “complementar”. Nacemos
completos ¿acaso Dios nos envió
con menos amor?
Es compartir felicidad, amor,
momentos, tristezas, tiempo,
diversiones….
No existe el complemento de nadie.
¿y la media naranja?, no existe…
Autor: Theresa Ameca Silvestre.
copyright© derechos reservados de autor