METAMORFOSIS

 

 

 

Recuerdo las miradas inocentes,
los semblantes de fé y felicidad,
la unidad de las familias, la paz,
el amor de las parejas, pureza.

La alegría de las margaritas,
las almas y el amor ingenuo;
las risas sin motivo, pasado es,
la vida ha cambiado...ya fue.

Lo que fue ya no volvera a ser,
el pasado es algo irrepetible,
no miraré lo fue o pudo ser;
mi vida es un cambio inesperado...

Hoy sólo veo miradas tristes...
sonrisas sin sentido ni alegría.
Siento el latir, zumbido y dolor
de álgidos corazones de acrílico.

No existe el amor sin falsedades;
no hay parejas con fidelidad.
Rostros cansados y sin fé, lo que es,
la vida cambia en segundos.

Las margaritas marchitas están
no hay que perder la fé,
en mí aún se alberga una semilla
de esperanza, esperanza de vivir.

Para que la vida nos cambie no necesita que pasen años ni siglos,
en segundos nos puede cambiar.

Autor: Theresa Ameca Silvestre.

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